Habrás
escuchado en más de una oportunidad la palabra parabenos, se trata de una
variedad de compuestos químicos que, incorporados a miles de productos y
también incluye a los cosméticos, tienen el fin de extender su conservación. En
la industria cosmética, todo lo que sean cremas, champú, maquillaje, geles,
tienen en general más de un parabeno en su formulación.
En este artículo te contamos todo lo que debes saber
sobre cuestiones tan importantes como qué son los parabenos, sus efectos en
nuestra salud, cómo identificar los parabenos en las etiquetas de los productos
y algunas alternativas caseras y naturales para hacerte tus propios cosméticos
DIY.
¿Qué son los parabenos?
Los parabenos
fueron descubiertos como antimicrobianos en 1924, son una familia de
alquil-ésteres del ácido para-hidroxibenzoico. Su función principal es la de
conservar el producto al que se añaden.
Al
tratarse de moléculas inodoras, incoloras, no volátiles, eficaces en un amplio
margen de pH y económicas, son ampliamente utilizados. Existen parabenos con
diferentes estructuras químicas y propiedades distintas, por lo que casi todas las formulaciones incluyen 2 o más
parabenos.
¿Piensas que los parabenos están solo en productos de higiene y cosmética?
Los parabenos se
utilizan básicamente como conservantes porque previenen la aparición de hongos,
levaduras y bacterias en medicamentos de uso tópico y medicamentos en
supositorios, jarabes, soluciones oftálmicas, contraceptivos,
corticoesteroides, anestésicos, heparinas y otros muchos. También se usan, en
concentraciones menores al 1% en pastelería, helados, cremas, refrescos,
fiambres, gelatinas y aceites, aunque en la Unión Europea su uso en alimentos
está regulado.
Además, los
parabenos están presentes en más del 90% de los productos cosméticos y de
higiene, aunque esto ha ido cambiando en las últimas décadas. Cada vez se
comercializan más cosméticos libres de parabenos, y esto suscita algunas
discusiones en el ámbito científico.
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¿Qué efectos podrían tener los parabenos en la salud?
La causa de que
vayan desapareciendo del uso en cosmética se debe a las investigaciones sobre
dermatitis de contacto alérgica, o hipersensibilidad retardada de tipo IV, en
relación a los parabenos.
Las
primeras publicaciones científicas sobre el Eczema Alérgico de Contacto (EAC)
fueron publicadas en 1940 y 1966, en los que la sensibilidad a los parebenos
podría estar influenciada por otras variables como la edad de los pacientes y
la presencia de otros componentes en los productos de uso tópico, así como la
cantidad de parabenos en los preparados.
A partir de 1990 se
comenzaron a realizar más estudios sobre dermatitis de contacto en los que
predominan conclusiones sobre una baja prevalencia de la sensibilización a los
parabenos. El Grupo Español de Investigación en Dermatitis y Alergia de
Contacto realizó 3 estudios: en 1990, con 4.600 casos; en 1992, con 3.832
casos; y en 2000, con 4.310 casos, encontrando una prevalencia de
sensibilización de 1,14%, 1,04% y 0,7% respectivamente.
En los últimos
estudios los científicos resaltan la importancia que tiene el daño anterior de
la piel en la adquisición de sensibilización a parabenos, mientras que los
casos en aplicaciones cosméticas con parabenos en pieles sanas son
‘extremadamente raros’.
Hasta
allí, los estudios dermatológicos respecto a reacciones alérgicas o
sensibilidad cutánea, pero también se
asoció a los parabenos con el cáncer y la esterilidad masculina, debido a que
no se han hallado pruebas de que el organismo pueda excretar los parabenos
aplicados en la piel.
Los vínculos con el
cáncer de mama comenzaron a investigarse a partir del hallazgo en tumores de
conservantes presentes en los desodorantes y su similitud con los parabenos
(alquilfenoles).
Las
investigaciones en cáncer y esterilidad masculina se siguen investigando, y se
han publicado diversos estudios con pruebas sobre los diferentes tipos de
parabenos en ratas vivas. Sin embargo, los científicos reconocen que aún falta
investigar y profundizar sobre los posibles efectos hormonales de los parabenos.
¿Cómo se identifican los parabenos en las etiquetas?
Mientras las pruebas se siguen
realizando, los productos con parabenos no están prohibidos y, la mayoría de
los dermatólogos los siguen recomendando, lo mejor es saber cómo revisar las
etiquetas y qué elegir en caso de que sea posible.
Los parabenos más
utilizados son: metil-parabeno (methylparaben, identificado como E-218);
etil-parabeno (ethylparaben o E-214); propil-parabeno (propylparaben o E-216) y
butil-parabeno (butylparaben); isobutil-parabeno (isobutylparaben);
isopropil-parabeno (isopropylparaben), bencil-parabeno (benzylpraben).
Desde 2014 hay 5 parabenos prohibidos por para el uso en cosmética
por la Unión Europea:
Isopropoilparabeno, isobutilparabeno, fenilparabeno, bencilparabeno y pentilparabeno.
Entonces, si el producto que
tienes o estás por adquirir contiene uno de estos cinco últimos, está
prohibido. En cuanto a los demás, trata de que tengan la menor cantidad posible
(por lo general no superan el 1%).
,
¿Por qué poner en riesgo la salud si se pueden usar cosméticos
naturales?
La piel es un órgano
especialmente sensible y, algunas áreas, son particularmente finas y
permeables, los poros absorben y acumulan los ingredientes de productos con los
que toma contacto.
Hay una frase popular muy
extendida que dice…
“Si no te lo comerías, no
lo pongas en tu piel”
Aludiendo a que, en
ocasiones somos cuidadosos con los alimentos que ingerimos pero no prestamos
suficiente atención a los productos que ponemos en nuestra piel y que son
absorbidos y acumulados en nuestro organismo.
Evitar los parabenos, en algunos elementos del maquillaje como el bálsamo labial,
puede no resultar tan difícil si utilizamos los ingredientes correctos: todo
producto que no contenga agua en su formulación, en general, no necesitará
conservantes para una duración considerable.
Por otro lado, puedes
prepararlos al momento de utilizarlos, hay algunos muy sencillos y con
ingredientes que probablemente tienes en casa.
Receta para hacer Crema Hidratante fácil y rápida
§
2 cucharadas pequeñas de miel
§
1 clara de huevo
§
5 gotas de aceite de almendras
Bates la clara hasta punto
nieve, agregas la miel y mezclas, luego las gotas de aceite de almendras y, una
vez unidos todos los ingredientes, ya puedes utilizarla.
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Receta de Champú casero
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1 yema de huevo
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1 cucharada de zumo de naranja
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¼ litro de infusión de
saponaria
Mezclar el zumo y la yema de
huevo y batir, agregar la infusión y mezclar bien. Y ya puedes usarlo.
Lee también:
§
Cómo elaborar champú en
función de tu tipo de cabello
Recuerda que estos productos no
se conservan, son para utilizar en el momento, y alguno de ellos hasta pueda
incluso sacarte de algún apuro.
También existen preparaciones
más complejas y con ingredientes o procesos para los que necesitarás varios
pasos y utensilios, pero siempre es posible empezar por los jabones. No son tan
difíciles y se conservan bastante tiempo, y además de que los usas a diario,
puedes prepararlos como regalos a amigos y familiares.
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Receta de Jabón de glicerina y leche de almendras
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120 g de base de jabón de
glicerina. Consigue glicerina de origen vegetal, sin aditivos ni sulfatos.
§
10 g de aceite de almendras.
§
1 cucharada de gel de Aloe
Vera.
§
100 ml de leche de almendras.
§
Molde (de silicona o similar)
Pasos a seguir: 1. Ante todo,
limpia y desinfecta con alcohol todas las superficies que vayas a utilizar,
recuerda dejarlo secar sólo con el aire (no repases para secarlo con trapo o
papel).
2.
Derretir la glicerina
calentándola a baño maría. En una hoya pones agua a calentar y en un bowl de
metal o en otra olla más pequeña pones la glicerina sin que el agua se menta en
ese recipiente, que se calentará e irá derritiéndola sin que se queme.
3.
A la glicerina derretida se le
agrega el jugo de aloe vera y hay que remover hasta que obtener una pasta
homogénea.
4.
Se añade el aceite de almendras
y se remueve hasta mezclar.
5.
Se incorpora la leche de
almendras y se mezcla bien.
6.
Tendrás que rociar los moldes
con alcohol antes de verter la mezcla en ellos, eso evita que se formen
burbujas.
En 24 horas el jabón estará
listo para usar o regalar. Con la misma base de glicerina puedes crear
variaciones con diferentes hierbas y aceites. Lo bueno de la glicerina de
origen vegetal es que, además de limpiar, hidrata la piel y es bien tolerada ya
que el pH es ligeramente ácido.
Lee más sobre preparaciones caseras en la sección de Remedios Caseros
Existen muchas recetas para
preparar diversos cosméticos en casa con ingredientes naturales, incluso
mascarillas para un tratamiento más profundo de la piel, siempre bajo la
consigna de que los mejores cuidados para el organismo son los componentes
naturales.
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Fuentes
§
“¿Se deberían prohibir los
parabenos en los cosméticos?. Luis Conde-Salazar Gómez y Felipe Heras Mendaza,
Servicio de Dermatología Laboral, Escuela Nacional de Medicina del Trabajo,
Instituto Salud Carlos III, Madrid, España. Elsevier Doyma,Piel. 2012
§
Seguridad de los productos
cosméticos. Red de Educación al Consumidor. Generalitat Valenciana.
§
The Cosmethics – Dra. María
Ugia
.
(Fuente Eco agricultor)
