lunes, 30 de mayo de 2016

SEMILLAS MÁGICAS que hacen maravillas en nuestro organismo




Salvia hispánica, comúnmente conocida como la chía, es rica en antioxidantes, ácidos grasos omega 3, proteínas y fibras.

Las semillas de chía tienen un aroma de nuez suave y tienen la capacidad de absorber líquidos que te mantiene lleno por un período más largo y te proporcionará una hidratación óptima
Mayas e incas utilizaron esta semilla en su dieta diaria. Chía en lengua maya significa fuerza.
Las semillas de chía son una excelente fuente de ácidos grasos esenciales saludables – contiene ocho veces más ácidos grasos omega-3 que el salmón!
Las semillas de chía están cargadas con omega 6 ácidos grasos y antioxidantes. Sólo un gramo de semillas de chía es más rico en antioxidantes incluso cuatro veces más que los arándanos frescos y proteínas que son muy importantes para la salud.
El consumo regular de semillas de Chía va a mejorar la salud del cabello, piel y uñas porque la Chía está cargada de proteínas (20%), según los estudios.
Si te sientes cansado y con falta de energía, las semillas de chía es lo mejor que puedes consumir. También mejora el trabajo de los músculos por lo que se utiliza a menudo por deportistas. Las semillas de Chía contienen 37% de fibras que mejoran la función de los intestinos.
La nutrición estrictamente sobre la base de semillas de chía es grande en la lucha contra el cáncer de colon y en la prevención del cáncer.
El consumo de semillas de Chía afecta la disminución del apetito, acelera el trabajo del
 metabolismo y activa el glucógeno, que es muy importante para quemar la grasa.

¿CÓMO USAMOS ESTAS SEMILLAS MÁGICAS?
Puedes agregar a las ensaladas, a los granos como el arroz integral, quinoa, el amaranto o mijo y mezclar bien. Además, se puede utilizar en sopas, albóndigas o como una mezcla para freír pescado y pollo.
Puedes preparar un pudín de semillas de Chía como postre.
(Tomado de la página SincroDestino)

Día Nacional de la papa: el alimento nuestro de cada día



La papa es el cuarto alimento básico del mundo. Hoy, cuando el Perú le rinde homenaje, le contamos algo más de este tubérculo ciento por ciento peruano.
No será una superheroína, pero, durante la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), fue la mejor combatiente. Ella solita nomás salvó del hambre a Europa. Sí, la papa, ese modesto tubérculo andino que en un principio fue visto con desdén en el Viejo Continente, ayudaría -gracias a su alto valor nutritivo- a evitar muchas muertes. 
Desde entonces, la papa (Solanum tuberosum) domesticada en las alturas del Perú, se convertiría, al igual que el arroz, el trigo y el maíz, en uno de los cuatro alimentos básicos de la dieta mundial.

Hoy ese 'tesoro de los Andes' que puede crecer a más de 4 300 m.s.n.m., está de fiesta en el Perú. Y es que el 30 de mayo, según lo establecido en la Resolución Suprema Nº 009-2005-AG, se celebra el Día Nacional de la Papa
Cultivo ancestral
Los procesos de domesticación de la Solanum tuberosum se iniciaron hace 10 000 años, aproximadamente. La papa fue la base de la dieta alimenticia de las sociedades prehispánicas del Perú antiguo. Además, tuvo un protagonismo especial en la tradición y costumbres de los pobladores de los Andes.

Según los estudios realizados en el 2005 por el investigador del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, David Spooner, la papa es originaria de la zona sur del país.  Al ser la cuna del tubérculo, en el país existen 100 especies de papa y 2 800 variedades de las 3 900 que hay en el planeta. 
Los datos
El Año Internacional de la Papa se celebró en 2008, tras una declaración de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés). 

África, Asia y América Latina lideran el crecimiento mundial en la producción de papa.
De: revista Rumbos. Diario La República.pe, mayo 2016