El
dolor de garganta es un padecimiento muy común entre las personas, que provoca
un malestar corporal y una disminución de la salud. Es muy común entre niños y
adolescentes aunque también se puede dar de forma habitual entre las personas
adultas y, en especial, en personas mayores y durante los meses más fríos del
año.
Este
dolor se suele situar en la zona interna del cuello y sus síntomas son la
sensación de picor suave o extremo, percepción áspera del cuello, sentir la
presencia de algún elemento externo que no se mueve, notar una inflamación o
hinchazón en toda la zona del cuello, dolor al tragar saliva, beber agua o
ingerir algún alimento, y molestias incesantes al hablar o incluso al respirar.
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Causas del dolor de garganta
Vamos a
ver cuáles son las causas más comunes del dolor de garganta en el siguiente
listado:
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Cambios de temperatura: una
de las causas más comunes es el dolor de garganta originado por los cambios
bruscos de temperatura, por ejemplo cuando la temperatura ambiente es muy alta
y se entra en un local climatizado dónde ésta cae en picado.
§ Falta de humedad en el aire: es otra de las causas más comunes que
afectan a las personas que trabajan con la voz. El tener que hablar en espacios
con una humedad del aire muy baja provoca una irritación en la zona de la
garganta debido a que el aire rasca las paredes y tejidos que se encuentran en
su camino. Una solución ante este problema es beber pequeños sorbos de agua o
tener un humificador cerca.
§ Resfriado común: también conocido como catarro. Son virus que se
expanden por el aire y que afectan a las personas durante cualquier momento del
año. Puede causar fiebre, mucosidad, dolor de garganta y malestar corporal
general.
§ Gripe: otra enfermedad común producida por un sólo virus mutante que suele afectar
en momentos puntuales del año y en grandes proporciones de población.
§ Infecciones bacterianas: faringitis, amigdalitis, laringitis. Son enfermedades
causadas por la presencia de bacterias en nuestro cuerpo que alteran su
funcionamiento. Suelen generar inflamación de la zona atacada: faringe,
amígdalas o laringe. También pueden provocar mucosidad de color verde, falta de
saliva o humedad en la zona afectada, fiebre y malestar corporal.
§ Mononucleosis: es una enfermedad infecciosa que se transmite por la
saliva, por eso se la conoce popularmente como la enfermedad del beso. Es
causada por el virus Epstein-Barr. Uno de sus síntomas
más común es el dolor e hinchazón de la garganta, puede ocasionar fiebre y
malestar general.
§
Alergias respiratorias: las
alergias son causadas por agentes externos a los que nuestro cuerpo reacciona
creando anticuerpos para defenderse. Las reacciones alérgicas pueden ser muy
dispares, pero entre ellas se conoce el dolor de garganta y la sequedad de
ésta.
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8 remedios naturales para el
dolor de garganta
Más
allá de los fármacos que podemos encontrar en las farmacias, hay todo un
conjunto de remedios naturales y sin tóxicos que nos pueden ayudar a tratar el
dolor de garganta y disminuir nuestras dolencias. Es el caso de los remedios y
tratamientos caseros que nos pueden ayudar a combatir estos síntomas.
Estos son los remedios caseros
y naturales que te propongo para combatir el dolor de garganta:
Infusión de tomillo y miel
Calentamos
en un cazo un vaso de agua hasta que hierva, momento en que apagamos el fuego y
añadimos una cucharada de tomillo y una cucharadita de miel. Lo dejamos reposar
durante 6 minutos y colamos el producto que ya está listo para ingerirlo.
Tomar una taza tres veces al día mantendrá la zona hidratada y
desinfectada gracias a las propiedades antiinflamatorias y antisépticas del tomillo y
la miel.
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Infusión de agrimonia, jengibre, limón y miel
La agrimonia tiene propiedades fungicidas y analgésicas que
ayudarán a reducir el dolor de garganta, el jengibre tiene
propiedades antisépticas y antiinflamatorias, con lo que disminuye la
inflamación y el dolor, y el limón es
un desinfectante natural, mientras la miel suaviza
la zona.
Repetimos
el proceso contado anteriormente: calentar agua, añadir una cucharada de
agrimonia, una punta de jengibre fresco, el zumo de medio limón y una
cucharadita de miel, dejar reposar entre 6 y 10 minutos, colar y servir.
Puedes
alternar las dos infusiones a lo largo del día.
Agua de Oreja de Oso (Ramonda
Myconi)
Es una planta con grandes propiedades, de las cuales resaltamos
que es antitusiva, expectorante y
suavizante.
Se
deben hervir 7 u 8 de sus hojas secas o frescas en abundante agua, dejar que
hiervan durante 5 minutos, apagar el fuego, retirar el recipiente y colar el
producto.
Se
suele utilizar miel para endulzarla porque tiene un gusto amargo.
Se
puede tomar un litro diario de esta agua.
Gárgaras de tomillo
Ya
hemos conocido las propiedades del tomillo, pero esta vez lo utilizaremos para
hacer gárgaras o buches por la mañana y por la noche.
Hervimos
una taza de agua con dos cucharadas de tomillo seco durante 10 minutos. Colamos
y dejamos reposar. Ya lo tenemos listo para usar.
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Gárgaras de cúrcuma y sal
Hervimos una taza de agua caliente, media cucharada de cúrcuma y
media de sal durante
5 minutos. Apagamos el fuego, colamos la bebida y la dejamos reposar hasta que
esté tibia.
Se
deben hacer las gárgaras por la noche y por la mañana para mejorar el
dolor de garganta.
Jarabe
de cebolla y miel
Pelamos y cortamos una cebolla,
la ponemos en una cacerola y le añadimos agua hasta cubrirla. Dejamos cocer a
fuego lento durante 1 hora.
Extraemos y colocamos en un
bote de cristal en el que añadimos media taza de miel.
Dejamos reposar durante 24
horas en un lugar seco y fresco y posteriormente colamos el producto.
Debemos tomar 2 cucharadas del jarabe 3 veces al día.
Debemos tomar 2 cucharadas del jarabe 3 veces al día.
La cebolla nos
aporta antioxidantes y actúa como antibiótico
natural, mientras la miel tiene
propiedades calmantes.
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Por último recordar que esta es
información general y que en ningún caso sustituye el consejo médico. En el
caso de que el dolor de garganta aumente o no disminuya es importante visitar
un profesional de la salud para que valore la situación particular de cada
persona.
(Tomado de Eco agricultor)
