lunes, 29 de septiembre de 2014

Antes de que desaparezcan las abejas

Una nueva campaña deAvaaz, a la cual nos aunamos, a favor de la permanencia de las abejas en nuestros campos y asegurar el trabajo de polinización y de reproducir vida.


Miles de millones de abejas se están muriendo sin que nos demos cuenta poniendo toda la cadena alimenticia en peligro. Las abejas no solo hacen miel -- son una fuerza de trabajo tan humilde como poderosa que poliniza el 75% de las plantas que crecen. Y ahora, dentro de 1 día, EE.UU. podría prohibir los tóxicos pesticidas que las están matando.

Sabemos que podemos conseguir una prohibición. El año pasado, tras una mega campaña de Avaaz, la UE prohibió este grupo de venenos a los que múltiples científicos culpan de la rápida desaparición de las abejas. Ahora mismo, las compañías químicas están presionando frenéticamente a las autoridades estadounidenses para que detengan el proceso.

Pero aliados internos dicen que un mandato público masivo podría inclinar la balanza a favor de una prohibición. ¡Vamos a dárselo en bandeja! Si EE.UU. se mueve en esta dirección, podrá en marcha una reacción en cadena que afectará al resto del mundo.

No hay tiempo que perder -- el grupo de trabajo sobre las abejas de la Casa Blanca presentará un informe con propuestas regulatorias este martes. Ya somos 3 millones los que hemos respaldado esta campaña. Démonos prisa y mandemos todos los mensajes que podamos a los responsables del grupo de trabajo antes de la reunión del martes. No se trata solo de salvar a las abejas, sino de nuestra supervivencia. Haz clic para enviar un mensaje ahora:

https://secure.avaaz.org/es/save_the_bees_us_sam_loc/?brSWreb&v=47141

Las abejas son esenciales para la vida en la Tierra. Cada año polinizan plantas y cosechas por un valor estimado de 40.000 millones de dólares. Sin acciones inmediatas para garantizar su labor de polinización, muchas de nuestras frutas, verduras y frutos secos favoritos podrían desaparecer de nuestros estantes y un 1/3 de nuestra cadena alimentaria desaparecería.

En los últimos años hemos visto el declive de las abejas a nivel mundial. Algunas especies ya se han extinguido y solo en California, donde se concentra la mayor producción agroalimentaria de EE.UU., los apicultores están perdiendo 1/3 de sus abejas cada año. Los científicos han estado buscando respuestas. Mientras algunos estudios, financiados a menudo por las compañías químicas, sostienen que esta situación podría deberse a una combinación de factores (incluyendo enfermedades, pérdida del hábitat y químicos tóxicos), potentes estudios independientes han concluido que los culpables son los pesticidas neonicotinoides.  

Esta alarmante evidencia junto con las efectivas campañas que hemos lanzado en colaboración con aliados estratégicos, lograron que la UE prohibiera los pesticidas más tóxicos. El Congreso de EE.UU. establece que la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA, por sus siglas en inglés) debe legislar sobre las toxinas pero, bajo la influencia de las grandes compañías químicas, ha estado esquivando esta ley durante años. Ahora el ‘Grupo de Trabajo sobre la Salud de los Polinizadores’ de la Casa Blanca puede obligar a la EPA a cancelar el registro de estos pesticidas para que no se puedan comercializar en EE.UU. ¡Es nuestra oportunidad!

El grupo de trabajo presenta su informe mañana. Y ya  somos 3 millones alrededor del mundo los que hemos respaldado esta campaña. Vamos a apresurarnos a mandar miles de mensajes para entregar nuestro llamamiento a quienes lideran este comité antes de que tomen una decisión:

sábado, 27 de septiembre de 2014

La ONU premia un proyecto peruano de mejoramiento de cultivos



Las plantaciones mejoradas proveen de más comida e ingresos a siete millones de agricultores en la región andina
VIENA (EFE). La Universidad Nacional Agraria La Molina ha recibido hoy uno de los premios que otorga la ONU a proyectos para desarrollar cultivos más resistentes mediante mutaciones inducidas por radiación.
Este reconocimiento es concedido por un programa conjunto de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA), con sede en Viena, y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que fomenta el uso de la tecnología nuclear para mejorar la seguridad alimenticia del mundo.
El proyecto utiliza, desde 1970, las mutaciones inducidas por radiación y técnicas de biotecnología para obtener variedades mejoradas de cebada, quinua y amaranto.
"Los cultivos mutados han ayudado a Perú a abordar las duras condiciones que afrontan sus agricultores en grandes altitudes", explicó hoy en un comunicado el OIEA.
La concesión de este premio se justificó en que "las variedades mejoradas de cebada y amaranto que se han producido, germinando a altitudes superiores a los 5 mil metros, proveen de más comida e ingresos a siete millones de agricultores en la región andina".
La iniciativa peruana es una de las cinco que ha recibido el Galardón por Logros Destacados en una ceremonia celebrada hoy en la Asamblea General que el OIEA celebra en Viena.